Thursday, June 29, 2006

Como Osama en Alabama

No me considero una persona que odie, ni intolerante de gustos musicales. Los que me conocen bien me han escuchado cantar todo desde Incubus hasta Intocable, desde Outkast hasta OV7, desde Rage hasta Reggaetón. No me molesta, me gusta mucho la música en general y creo que es, junto con el cine y la literatura, una de las formas de arte más plurales y más versátiles en las que se pueden transmitir todo tipo de sentimientos y percepciones.

Sin embargo, recientemente me di cuenta de algo: No tolero a Arjona. Es algo más fuerte que yo. Veo su cara en un poster y tengo ganas de golpearlo, leo alguna de sus frases y me entra ese sentimiento que da cuando te estás cepillando la lengua y sin querer metes demasiado el cepillo de dientes y por un segundo sientes que vas a vomitar. Así lo odio. Es ese odio extremo que sólo se puede tener por algo que se apreció mucho antes.

Así es, lo tengo que admitir: Fui fan de Arjona. Fui a 2 conciertos suyos hace unos 10 años y esperé con ansia que saliera "Si el norte fuera el sur" y lo devoré, me aprendí todas las canciones y lo tarareaba incesantemente, realmente pensaba que era una buena crítica decir "córtaselo a tu marido y ganarás reputacióooooooooon". Compré discos anteriores, creía firmemente que si las mujeres me pedían algo y no podía era porque no existía y que él era un genio por decirlo. Tuve veladas completamente alcohólicas y masoquistas porque había encontrado al amor de mi vida "Tarde" y "Sin daños a terceros". Fue horrible.

Sin embargo, gracias a Dios, yo cambié. Aprendí que hay más en la música que cantar con voz desgarrada-rasposa, rimas y acordes sencillos y excesivas metáforas y símiles. Arjona, tristemente, no. La reflexión que acompaña su último disco (ahora tienen reflexiones), que incluye una canción aparentemente titulada "Acompáñame a estar sólo" (Ahí viene el cepillo de dientes) es la siguiente:

"Tengo dos sueños, sin dueño
una disculpa por culpa
y un malestar por estar
¿tienes el remedio del tedio?"

Por el amor de Dios y de todo lo que es sagrado en este universo, ¿qué clase de basura es esa? ¿a qué persona sensata le puede parecer profundo, romántico o simplemente agradable un dicho tan barato y trillado? Lo leí el otro día en un escaparate (palabra que siempre quise utilizar) y sentí que todos los clichés malviajantes del mundo ("Jugamos como nunca, perdimos como siempre" et al) se habían reunido en cuatro renglones para morder violentamente la yugular de mi estado de ánimo. En serio pocas veces tan pocas palabras me han puesto tan de malas en mi vida (con la posible excepción de algún"ya no te quiero" o "hay que ser amigos").

Carajo, Arjona, ¿neta qué pasa contigo? ¿como que "un hippie en Siberia"? ¿como que "Reagan sería Somoza"? ¿como que "Santo Pecado"? ¿como que "te enamoraste de ti, y no de mi, porque el Santo Pecado del tigre en la luna con el Che haciendo hamburguesas en Wall Street y yo oigo Serrat y tu prefieres Locomía, pero el problema no es problema? AAAAAAAAAAARGGHHHHH !!!!!!!!!!!!!!!! ES DEMASIADO!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Perry: ¿Y los ojos de asesina?

Tuesday, June 27, 2006

El "tú por tú"

México está eliminado del mundial. Es triste, pero cierto. La emoción que venía creciendo durante los últimos 4 años ha terminado después de un climático partido contra Argentina en octavos de final. Una vez más, no se pudo.

Los comentarios al respecto han girado en torno a dos vertientes generales: Los que ya habían anticipado la derrota y ahora se regodean con aires de superioridad diciendo "¿Qué esperaban? México siempre ha sido así y siempre lo será" Por otro lado están los que dicen que México había estado jugando mal y que el partido contra Argentina pudo haber sido al revés de no ser por "extraños azares del destino" Los que dicen "pero México jugó muy bien y además estaba jugando contra Argentina"

Yo no estoy de acuerdo con ninguna de las dos percepciones porque las dos parten de un argumento que yo creo equivocado: que México es un equipo que juega mal al futbol (que no joga bonito, como diría Nike) y que por lo tanto es incapaz de estar a la altura de equipos como Argentina, y que por lo tanto cada vez que se le ponga al "tú por tú" hay que aplaudir el esfuerzo, aceptar la derrota y esperar que el próximo partido los hados nos sean favorables.

Por esto yo no estoy contento con la selección mexicana. Sí es cierto que jugamos muy bien contra Argentina en este mundial, pero también jugamos muy bien contra Argentina en la Copa Confederaciones del año pasado, y jugamos muy bien contra Alemania en el 98, y contra Bulgaria en el 94 y contra Alemania una vez más en el 86 e incontables otros partidos legendarios de los últimos 20 años que han dado existencia al excesivamente trillado y malviajante dicho de "jugamos como nunca y perdimos como siempre" (Si algún lector de este blog alguna vez me escucha decir esta frase, tiene mi permiso para zapearme fuertemente)

No estoy contento porque creo que México es un equipo que juega buen futbol, pero que tiene un pequeño defecto: No mete goles. Suena ridículo, lo sé, pero es cierto. De los 5 goles que metió en este mundial, por lo menos 3 surgieron directamente de una jugada a balón parado. Y si no es así, México no puede. No hay un jugador en la selección mundialista que pueda driblar a 3 jugadores y meter un tiro o que de media distancia pueda hacer un gol a la Maxi Rodríguez (aunque duela) y eso, más que cualquier otra cosa, es lo que está matando al futbol mexicano.

La buena noticia es que dentro de 4 años el veteranazo Rafa Márquez, como capitán del equipo, lidereará a Andrés Guardado + Giovanni Dos Santos y la sub-17 para que nos lleven a la final de Sudáfrica 2010.

Perry: More like childishly upset

Thursday, June 08, 2006

Temper tantrum

Estoy frustrado. He llegado a un punto en mi vida en las que hay algunos planes de mi vida que tengo que descartar. No sé si le pase a todo mundo o si forme parte de mi muy egocéntrica forma de ver la vida, pero durante mi niñez y adolescencia, siempre pensé que podría hacer cualquier cosa con mi vida futura. Ahora que tengo 25 años, una carrera y una panza chelera y veo frustrados algunos de mis planes, me da coraje y hago berrinche, y es lo que este post es: un berrinche de lo que pudo haber sido y no fue y no será y no tendré otra vida para lograr.

Empezando con la fiebre mundialística, me doy cuenta de que jamás seré seleccionado mundialista, por más que empiece mañana a entrenar y no haga otra cosa por el resto de mi vida, no llegaré al nivel necesario. Cuando tenía 6 o 7 años y todos mis amigos jugaban mejor que yo, pensaba "Si quisiera, podría ser mejor que ellos, pero prefiero leer y ser inteligente"

Jamás podré tener un acento inglés creíble. Llevo 25 años en México y además soy mitad gringo Y ADEMÁS de Oklahoma. Aunque me mudara mañana a Inglaterra y viviera ahí por el resto de mis vidas jamás podría decir "I'm going to the loo", "call me on my mobile" o "give us a pint, will ya, mate?" sin sonar como gringo wannabe.

Jamás podré ser judío. Creo que esto siempre estuvo fuera de mi alcance, con mis creencias religiosas y demás, pero tener una abuelita que hablara yiddish, hacer kvetching y seguir todos los rituales de este pueblo que siempre me han parecido muy interesantes. Eso sin contar las judías guapísimas que hay en el mundo.

Jamás seré mutante. Toda persona culta que ha leído los comics de los "equis-men" sabe que los poderes mutantes se manifiestan en la adolescencia. A mis 25, fuera del poder de expandir mi estómago a tamaños jamás pensados hace 7 años, no creo que vaya a desarrollar ningún poder. Es una lástima, siempre pensé que mis poderes, cuando llegaran, incluirían detener el tiempo y sólo yo moverme por el mundo. Además de los obvios beneficios voyeuristas, me agradaba la idea de poder dormir más. Con esa ambición, no es sorprendente que no haya obtenido poderes. Es una lástima, las chicas mutantes suelen ser muy guapas, igual que las judías.

Llevo cerca de 10 minutos pensando, y no se me ocurre que otra cosa jamás podré ser, o hacer. Supongo que la vida no es tan mala después de todo. Además, esto apenas empieza.

12 horas para el mundial: Paren el mundo, cierren los negocios, cancelen la escuela, armisticio en todas las guerras, tregua política, abstinencia sexual, enciérrense en su bar de confianza con 20 o 30 amigos, unas 1000 chelas y un par de vacas fritas (aunque Sónico se enoje) y no salgan en un mes.

Perry: Don't kvetch about football, mate